Fue en 2014 cuando una niña americana de los Scouts se plantó en la entrada de una clínica de marihuana a vender galletas, para recaudar fondos para la organización juvenil.
En dos horas vendió la friolera de 117 cajas de galletas. No vendió más porqué no tenía más.
Tanto si has probado el cannabis alguna vez como si no, seguramente sabrás que es un estimulante del apetito. Así que la niña estaba en el lugar correcto con el producto indicado.
Ojalá todos los emprendedores y marketers encontráramos el canal indicado para vender de forma recurrente, pero como esto no suele ser así, tenemos que encontrar otras fórmulas para llamar la atención de nuestros potenciales clientes y en este sentido el storytelling es un método súper potente que aplican muchísimas marcas.
Si tuviéramos que hacer una definición de storytelling (muy general) podríamos decir que significa “contar historias”. Y es que en eso consiste esta técnica: en crear narraciones en torno a tu marca con el objetivo de atraer más clientes y convertirlos en seguidores fieles.
En dos horas vendió la friolera de 117 cajas de galletas. No vendió más porqué no tenía más.
Ojalá todos los emprendedores y marketers encontráramos el canal indicado para vender de forma recurrente, pero como esto no suele ser así, tenemos que encontrar otras fórmulas para llamar la atención de nuestros potenciales clientes y en este sentido el storytelling es un método súper potente que aplican muchísimas marcas.
Si tuviéramos que hacer una definición de storytelling (muy general) podríamos decir que significa “contar historias”. Y es que en eso consiste esta técnica: en crear narraciones en torno a tu marca con el objetivo de atraer más clientes y convertirlos en seguidores fieles.
En los últimos años, el uso del storytelling se ha extendido entre empresas grandes y pequeñas como una forma de humanizar nuestra marca y empatizar con el cliente para, así, aumentar nuestras ventas.
Pero lo cierto es que esta técnica ya existe desde que el ser humano es capaz de comunicar y, por tanto, de contar historias.
Cualquier marca puede y debería utilizar el storytelling para conseguir los objetivos de su empresa. Da igual que hablemos de una gran empresa, una PYME o nuestra marca personal.
Ahora, me gustaría explicarte 5 de las ventajas que puedes obtener si empiezas a aplicar las diferentes técnicas de storytelling en tu negocio.
Llegas a crear un vínculo emocional con tus clientes. Gracias a la creación de un relato de marca, los usuarios se sentirán identificados con los contenidos que les ofreces y se verán representados en los valores presentes en tu página web, las imágenes que usas, los colores que eliges, los mensajes que lanzas…
Aumentas tu poder de persuasión. Poniendo en práctica las técnicas propias del Storytelling, podrás persuadir mejor acerca de una idea. ¿Sabías que el 95% de las decisiones de compra son emocionales? Contando historias que generen emociones lograrás vender mucho mejor tus productos o servicios que, simplemente, comunicando las características que lo conforman.
Consolidarás tu marca en torno a unos valores claros. Estos valores también están asociados con las creencias con las que queremos dotar a nuestra propia empresa. Si una persona está identificada con un movimiento o estilo de vida y se siente identificada con tus valores como marca, será más propensa a comprarte a ti antes que a tu competencia.
Mejorarás el recuerdo de tu marca y crearás una marca que deje huella. Situarte en el “top of mind” (estar en mente) de tus clientes es fundamental para superar tu competencia. El storytelling te ayudará a crear una marca que permanezca en el recuerdo de tu público objetivo, que consuman tus productos cuando los necesiten y que, además, te recomienden. Con el storytelling harás que tu marca sea especial, gracias a la construcción del relato de marca, harás que tu empresa no sea una más del montón y la podrás dotar de relevancia.
Lograrás diferenciarte de tus competidores y que tus seguidores actúen. Como hemos visto, nuestros valores y mensajes clave nos ayudan a humanizar nuestra marca y, con ello, se convierten en la base de nuestra estrategia de comunicación. El poder de las historias también nos permite lograr que el interlocutor realice una acción: todos los beneficios que hemos visto que el storytelling nos brinda tienen, como consecuencia, el logro de que las personas que nos siguen y conectan con nuestro relato realicen una acción concreta: comprar nuestros productos, suscribirse a nuestra lista de correo, seguirnos en redes sociales, recomendarnos…
Ahora ya tienes todos los ingredientes para empezar a conquistar a tu audiencia gracias al storytelling. Espero que estos consejos y ejemplos te hayan dado múltiples ideas y empieces a trabajar cada mensaje que utilizas con tu marca.
Y para acabar…
El resultado final debe despertar el interés y la confianza hacia nuestros valores y productos. En este contexto, resulta necesario definir una estrategia de storytelling para diferenciarte y destacar tu propuesta de valor de la de tu competencia.